El Modo Juego de Windows 10 detiene muchas actividades en segundo plano para garantizar el máximo rendimiento de los juegos en el PC. A continuación te explicamos cómo utilizarlo
Si la mayor parte de tus juegos los realizas en un PC, es muy probable que utilices una máquina con Windows.
Si bien eso está bien para las máquinas dedicadas, puede ser una lucha para un dispositivo más cotidiano.
Muchos PC y portátiles afirman ser tan buenos para los juegos como para la productividad general hoy en día, aunque no siempre es así. Sin embargo, el modo de juego integrado de Windows 10 puede ayudar a reducir la brecha asignando más recursos cuando se juega y desactivando los procesos en segundo plano.
Cómo activar el Modo Juego en Windows 10
El proceso para activar el Modo Juego es muy sencillo:
- Abre el menú de Configuración, ya sea buscándolo o haciendo clic en el icono de la rueda dentada en el menú de Inicio
- En la ventana que aparece, elige “Juegos” y selecciona la pestaña “Modo Juego” del panel izquierdo
- Asegúrate de que la opción “Usar el modo de juego” está activada.
Cómo activar el Modo Juego desde un juego
Una vez activado el Modo Juego en los Ajustes, se puede activar para la mayoría de los juegos. Esto significa que no tiene que estar activado para el juego básico, pero puede entrar en acción si estás luchando para manejar algo más intensivo.
- Inicia el juego que quieres utilizar en el Modo Juego
- Ahora debería pedirte que introduzcas el atajo de teclado Tecla Windows + G, o el botón Xbox si has conectado un mando. Si no es así, suele significar que el juego no es compatible, pero vale la pena intentarlo de todos modos
- En la barra de juegos que se abre, haz clic en el icono de Configuración en el extremo derecho de la pantalla
- Se abrirá una ventana separada, y aquí sólo tienes que marcar la casilla “Usar el modo de juego para este juego”.
¿Qué diferencia hay en el modo de juego?
Uno importante, siempre que no tengas un hardware de juegos dedicado. Esos dispositivos probablemente se las arreglarán bien incluso con títulos de alta intensidad gráfica, pero definitivamente verás un beneficio en los dispositivos de presupuesto o de gama media.
El Modo Juego funciona restringiendo las actividades de fondo para maximizar el rendimiento de los juegos. Esto significa que cosas como las actualizaciones y las notificaciones se desactivan temporalmente, lo que garantiza que se asigne la máxima cantidad de recursos al juego que estás jugando.
Microsoft ha declarado específicamente que el Modo Juego permitirá una “experiencia de juego más consistente”. Esto significa que la velocidad de fotogramas se mantendrá más estable, evitando caídas y grandes variaciones que pueden causar lag.
Este vídeo, publicado cuando la característica debutó en Windows 10 en 2017, explica más: